Jorge Aliaga Cacho en el Molino Rojo, París. |
Quizá en sí mismo el Moulin Rouge es un enorme estereotipo del Pigalle de París. Situado en el IX Distrito, el barrio en referencia es el sitio del pecado de la ciudad. Por supuesto hoy es una atracción turística de primer orden, una por el morbo que evoca y otra porque expone simbolismos de las grandes épocas bohemias de París. Asociado con el alcohol, el consumo de drogas sociales burguesas, las grandes parrandas. Todo lo irreverente, o transgresor tuvo cobijo en el barrio de la perdición en el que todos querían estar. Ese es el espíritu de la noche y sus criaturas divertidas, las que vivían sin freno, sin etiquetas y sin restricciones. París es sencillamente para aquellos que se entregan a ser. El Molino Rojo es la representación plena del artista, el bohemio y el loco. Sitio de aquellos y, muy importante, aquellas que siempre quisieron salir de lo socialmente adecuado y correcto, para sencillamente Ser. Ahora le advierto, mi opinión es de la puerta para afuera. El espectáculo y sus precios son otra cosa, y como turista de rango económico, no supe qué pasaba allí en el Molino Rojo.
Fuente: https://www.tripadvisor.com.pe/ShowUserReviews-g187147-d189283-r279773465-Moulin_Rouge-Paris_Ile_de_France.html#
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