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Julio Villanueva Sotomayor y directivos del Club Ancash. |
Estimados asociados: El artículo 32° de nuestro estatuto dispone que: “La asamblea general se lleva a cabo en las siguientes oportunidades: Inc. a). En la segunda quincena de marzo de cada año, para recibir la Memoria Anual del Presidente del Consejo Directivo y aprobar los Estados Financieros al 31 de Diciembre del último ejercicio, con el informe del Comité de Patrimonio y dictamen de la Junta Revisora de Cuentas”. Para cumplir la primera parte de dicho artículo, me encuentro frente a ustedes, nuevamente, para presentarles mi memoria anual de marzo del 2020 a marzo del 2021. AÑO DE LA ADMINISTRACIÓN DEL CLUB ÁNCASH EN PLENA PANDEMIA • Los principios de la moderna administración fueron establecidos por Henry Fayol, un minero francés que nació en Estambul, año 1841, y murió en París, año 1925, y dijo en el año 1916 que una moderna administración debe estar basada en 14 principios: 1. División del trabajo, 2. Autoridad y responsabilidad, 3. Disciplina, 4. Unidad de mando, 5. Unidad de dirección, 6. Subordinación del interés individual al general, 7. Remuneración, 8. Jerarquía, 9. Centralización, 10. Orden, 11. Unidad, 12. Estabilidad, 13. Iniciativa y 14. Espíritu de cuerpo. • Durante la pandemia, los principios de Fayol y de otros economistas o académicos quedaron casi en letra muerta o la mayor parte de ellos cayeron en saco roto, se convirtieron en estériles; por otros factores apremiantes. De los 14 principios mencionados líneas arriba, en el caso del Club Áncash, solo 5 nos auxiliaron y muy moderadamente: Autoridad y responsabilidad, unidad de dirección, subordinación del interés individual al general, unidad y espíritu de cuerpo; es decir, solo la tercera parte. • Si quisiéramos hacer una comparación, diríamos que ese hecho fue parecido a la labor de un médico y sus recursos tecnológicos frente a un caso de coma diabético. O parecido al de un capitán de barco en momentos acuciantes de una tormenta en alta mar. O al de un general casi sin recursos militares en el frente de batalla. Como en el caso de todos ellos, la administración se hizo más problemática en la nueva normalidad que en las épocas de normalidad, disminuyó en sus intenciones, casi colapsó en resultados. • Pero, al médico, que dentro de sus limitaciones, supo mantener a una persona con coma diabético y pudo salvarla: hay que darle las gracias. Al capitán que, a pesar del terrible embate del mar, venció a la tormenta y sacó su barco a flote: hay que agradecerle. Al general que, quemando el último cartucho de su fusil, supo conservar la serenidad y cuidó la supervivencia de sus soldados: hay que agradecerle. Todos ellos, en una situación desesperada recurrieron a su ingenio, a su creatividad para poder sobrevivir y sobreponerse, para mantener los recursos y los individuos a su cargo a salvo utilizando el principio esencial de Fayol; el “espíritu de cuerpo”; la solidaridad, la ayuda mutua. • Ello, en el año 2020 y en lo que va del 2021, ha ocurrido en todas las familias, las que, igual que las instituciones, han tenido que enfrentarse a la enfermedad y a las dificultades económicas. • Diría que para todos ha sido más difícil vivir durante la pandemia que antes de ella. ¿Qué individuo, qué núcleo familiar, qué comunidad, qué institución no ha mermado todas sus actividades, sus ingresos y su producción? Muchos han perdido a sus seres queridos para quienes van mis plegarias para que estén en la gloria de Dios. Hemos perdido a distinguidos asociados, para quienes en forma especial va nuestra oración para que estén gozando del reino de Dios. • Por eso, es conveniente que, en primer lugar deje constancia que doy un voto de aplauso y otro de gratitud a los integrantes del Consejo Directivo período 2019-2021 porque, a pesar de todas las dificultades, supieron mantener la propiedad del club a salvo, resguardándolo de todas las avalanchas en plena época de la pandemia. Supieron usar “la subordinación del interés individual al general” y el “espíritu de cuerpo”, con vigencia permanente de una ejemplar conducta, con responsabilidad, confianza y solidaridad, sello imprescriptible y legado histórico de quienes formaron el Club Áncash. LA ADRENALINA ESTUVO REBOZANTE EN 2019 • Los asociados del club que colaboraron con todo el cronograma de actividades deben recordar que el año 2019 fue de plena efervescencia cultural y se cumplieron con creces los planes trazados. La administración fue fluida y la adrenalina se mantuvo al tope tratando de resolver de la mejor manera posible la planificación, organización, dirección, coordinación y control en el quehacer cotidiano del club. • Pero, cuando todo estaba preparado para relanzar el club y encontrar las alas del éxito, en el mes de marzo de 2020 tuvimos que parar todo, bruscamente. • Creíamos y creo que también todo el mundo creía, que era cuestión de poco tiempo y, fatalmente, el tiempo también fue contagiado por el COVID19 y se enfermó hasta el día de hoy y no se sabe cuándo se va a sanar. DOS EJEMPLOS PARA QUE NOS DEMOS CUENTA DE LA NEFASTA INFLUENCIA DEL COVID 19 EN EL CLUB ÁNCASH 1). Ustedes saben que nuestro potaje de bandera es el picante de cuy. La administradora, seguramente para atender un probable consumo mensual, adquirió 700 cuyes y llenó la refrigeradora. Con la paralización hubo ausencia total de los comensales y el insumo estaba allí cuando se declaró la pandemia y la cuarentena. Mientras la descomposición estuvo todavía ausente, se ordenó la venta. Pocas decenas de cuyes se vendieron al remate y la gran mayoría se perdió, aumentando la deuda con la vendedora, que a la sazón ya bordeaba los 9 mil soles. Cosa parecida ocurrió con otros productos de pan llevar, muchos de los cuales siguen inmovilizados. 2). El 23 de noviembre de 2019 desapareció como por arte de magia más de 6 mil soles de la caja fuerte. Se hizo la denuncia policial. Los trámites en la comisaría de Jesús María quedaron paralizados por la pandemia. Después de un año y cuatro meses, recién el día 19 de marzo del 2021 me llamaron para hacer mi declaración. El día 22 me han dicho que, como soy adulto mayor, van a preguntar a fiscalía si se puede hacer la comparecencia vía Zoom. Esos dos ejemplos, uno, de apertura de la pandemia y, dos, al estado en que está ahora grafican las consecuencias que nuestro club tuvo y está teniendo en esta contingencia. Entre el caso 1 y el caso 2 múltiples problemas se presentaron y se tuvieron que resolver o tratar de solucionarlos. SUSPENSIÓN PERFECTA DE LABORES • En vista de la grave situación se tuvo que recurrir a la suspensión perfecta de labores, dispuesta por el gobierno hasta en tres oportunidades y la última de nuestro mandato se cumple el 5 de abril del 2021. • Para cuidar el local, se negoció con el guardián señor Raúl Vega para que se quede, pero también él ha optado por renunciar e irse hace poco, de tal manera que el club está solo con un vigilante de afuera. Como no hay recursos económicos para pagar a otro guardián permanente, se ha optado por cambiar las chapas y los candados. • Un bono de 1785 soles que dio el gobierno para aliviar el presupuesto de los trabajadores no se ha podido cobrar de Interbank, por limitaciones del estatuto para ese tipo de transacciones. De tal manera que nuestros trabajadores se han quedado sin ese beneficio, a pesar de las múltiples gestiones que se han hecho. • Con los ingresos por las elecciones, se ha cumplido con pagarles una deuda que se les tenía por días trabajados en el mes de marzo del 2020. ENFERMEDAD DEL PRESIDENTE • Una de las primeras víctimas del COVID 19 fue el que lee esta memoria, en la segunda quincena de marzo y contagiado en una actuación del día 12 de marzo en el Club Áncash. De tal manera que pedí licencia por 6 meses y la dirección del club estuvo a cargo de la asociada Blanca Beatriz Silva Ramírez, a quien agradezco públicamente por su entrega al club en momentos tan difíciles, porque lo hizo con abnegación, cariño y mucha capacidad. Los demás miembros del Consejo Directivo también estuvieron a la altura de ese inusual reto, actuaron con prolijidad, entusiasmo a toda prueba y competencia. Va mi agradecimiento más profundo a Ricardo Losza, Justo Ponte, Mariluz Antúnez, Américo Valverde, Rosa Chincha, Zonia Ríos, Ulises Vidal, Leopoldo Ochoa, Julio Gonzales, Gloria Alvarado y Betsabé Salinas. • Todos ellos no se amilanaron ante la pandemia y con mucha responsabilidad, ingenio e inteligencia asumieron el reto de mantener el club a pesar de la difícil contingencia. No abandonaron el barco, se mantuvieron firmes. Felizmente, pronto me restablecí y pude incorporarme plenamente al Consejo Directivo. Me acuerdo de las sesiones virtuales del Consejo Directivo casi todos los martes de todas las semanas para resolver los problemas, pergeñar propuestas y endulzar la menta con el optimismo y la esperanza. • Sin mediar el peligro para nuestra salud, se formaron varias comisiones y se hicieron encargos individuales para que hagan gestiones presenciales en diversas instituciones públicas y privadas. • Se efectuaron programas culturales vía Internet de celebración y homenaje a las principales fechas cívicas del club y del departamento, así como la presentación de nuestros cultores del arte y del folclore. LOS GASTOS FIJOS • Otro problema que muy pronto se detectó fue el de los gastos por servicios permanentes, tales como la luz, agua y teléfono. • El teléfono nunca pudo estar a nombre del Club Áncash por limitaciones estatutarias. Estuvo a nombre de los presidentes y esta vez no podía ser la excepción. Como se tenía la esperanza de que pronto podríamos reabrir el club se hizo un esfuerzo económico y se habilitó el servicio, pero nos dimos cuenta que era un gasto inútil y tuvimos que suspenderlo. A pesar de ello, en los meses de diciembre, enero y febrero Movistar lo adicionó a la cuenta de mi celular, con el cargo de “teléfono de hogar”, y se pagó la suma de 426 soles para darle de baja definitivamente. • La luz eléctrica pagaba la suma de 1800 soles, lo que también era una carga adicional. Se negoció con Luz del Sur para hacerlo por partes y al no tener la certeza de una pronta apertura del local se tuvo que pedir la suspensión del servicio. • Los arbitrios municipales tampoco podían faltar y eran de una cifra similar al del recibo de luz (1834,00 soles mensuales) . Se ha hecho la gestión correspondiente y se ha logrado una rebaja considerable (1122,00 soles mensuales). • Otras cargas eran las deudas del club a la Municipalidad de Jesús María, habían llegado a 137 mil soles. El Fiscal señor Justo Ponte encontró una conexión política y se sinceró la deuda, consiguiéndose una rebaja hasta los 10 mil, aproximadamente. • Con respecto a las ocho cargas y gravámenes de embargo a la propiedad del Club Áncash que se encuentran en SUNARP se obtuvo la información que 5 eran de los años 1999 al 2006. Se ha hecho el trámite documentario correspondiente para levantar dichas cargas por caducidad, por tener más de 10 años de antigüedad. Dos embargos de INDECOPI fueron cancelados por el Club Áncash, pero no fueron levantadas las cargas en SUNARP, por lo que se ha remitido una carta a esta entidad, pidiendo los documentos para que el club haga el trámite de levantamiento de las cargas, una de 2854,00 soles y otra de 5591,00 soles. SIN RESPALDO FINANCIERO • Todas estas medidas, unas más exitosas que otras, se realizaron sin ningún recurso económico, con ingreso cero, solo por el entusiasmo y la dedicación de los integrantes del Consejo Directivo. LA LICENCIA DE FUNCIONAMIENTO . Cuidándonos del COVID 19, en una de las reuniones en el patio del local municipal con funcionarios de la Municipalidad de Jesús María se recabó la información verbal de que el Club Áncash nunca había perdido su licencia de funcionamiento. Ni cortos ni perezosos, hicimos una carta y tuvimos la grata satisfacción de tener la respuesta: la licencia de funcionamiento del Club Áncash “ESTÁ VIGENTE”. • Este es el documento aludido: • En la última parte dice, textualmente: “Finalmente, en base a lo indicado en los párrafos anteriores, señala que el predio ubicado en Av. Horacio Urteaga N° 660 – Jesús María – cuenta con la misma zonificación calificada: RDA (Residencial de Densidad Alto) por la cual se emitió el Certificado de Licencia de Funcionamiento N° 003445 de fecha 16.12.2010¸ en consecuencia, no existiendo Cambio de Zonificación a la fecha, no ha sido oponible y por lo tanto a la fecha de hoy, el Certificado de Licencia de Funcionamiento N° 003445 es válida y se encuentra vigente. “Sin otro particular, se da por atendida su consulta la misma que será derivada a la Subgerencia de Atención al Ciudadano, Gestión Documental y Archivo para su custodia y archivo”. (Sello y firma de la MJM). • He copiado esta constancia histórica para que cada asociado lo tenga y sepa que en cuanto al funcionamiento del Club Áncash no hay ninguna restricción para su uso y funcionamiento y que este documento sirva de testimonio del interés y del éxito que hemos tenido para resolver tan grave problema, que venía arrastrándose desde el año 2010. MANDATOS DEL ESTATUTO • El estatuto es un instrumento jurídico importante para toda institución social. Fatalmente, el nuestro ya está obsoleto, con muchos puntos contradictorios y limitativos. No es un cuerpo jurídico moderno ni dinámico. Al contrario, pasadista y estático. Nos hicimos el propósito de revisarlo y dar alternativas. Dejamos escritos 3 proyectos, de Leopoldo Ochoa, Justo Ponte Cruz y Julio Villanueva Sotomayor para que se tenga en cuenta en la reformulación del estatuto, si es que se considera por conveniente. • Sin embargo, el Consejo Directivo cumplió con todos sus preceptos y llamó a varias asambleas para hacer las consultas correspondientes. • Una de las más importantes fue la que se realizó el 23 de enero de 2021 para dar cuenta de los planes de reactivación, a corto, mediano y largo plazo. El Plan “C” pidió el aporte de los asociados, cosa que se produjo en cuenta gotas. El Plan “B” establecía una ayuda ofrecida por el Ministerio de Cultura, asunto que no se obtuvo por la repartija habitual en el Perú. El Plan “A” se refería a una renovación integral del club y debía llevarse a cabo a largo plazo, con intervención de todos los asociados y de varias comisiones de apoyo, asesoramiento y consulta. También fue abortado por falta de comprensión, comunicación y muy serios prejuicios, entendible en una sociedad como la nuestra. LAS ELECCIONES DEL 2021 • Con el más amplio espíritu democrático, que lo defendimos a raja tabla en el pasado y lo seguiremos defendiendo en el futuro, se dio facilidades para la participación de los asociados en dicho evento. • Por acuerdo del Consejo Directivo y ante la imposibilidad de que el Club Áncash tenga su cuenta propia y que el Subdirector de Economía tenía una cuenta mancomunada, se abrió una cuenta especial a nombre del presidente del club al iniciarse dicho proceso, con cuenta única para ese fin y con tarjeta única para dicho fin, de tal manera que el 18 de febrero, día en que se cerraban las inscripciones de asociados para ser hábiles para el sufragio, la mencionada cuenta también se cerró con un saldo favorable de 17 570 soles, dinero que pasó ese mismo día para que lo administre el señor Subdirector de Economía. • De no ser por esa medida, los asociados, muchos de ellos adultos mayores, habrían tenido dificultades para hacer sus aportes y participar en la más importante actividad democrática del Club Áncash. PALABRAS FINALES • Hemos cuidado la única propiedad del Club Áncash en el año de la pandemia, con esmero, sacrificio y dedicación. • Hubiéramos querido entregar un club remozado, con más prestigio cultural y con ambientes que debían bullir con el recuerdo de todos ustedes, de sus amigos y parientes, así como en el año 2019. • El Club Áncash es parte de la memoria histórica del departamento, de los asociados y de la cultura regional, por lo que está por encima de todas las circunstancias habidas y por haber, de todas las dificultades MEMORIA ANUAL DE JULIO VILLANUEVA SOTOMAYOR LEIDA EN LA ASAMBLEA GENERAL DE ASOCIADOS EL 26 DE MARZO DE 2021 Estimados asociados: El artículo 32° de nuestro estatuto dispone que: “La asamblea general se lleva a cabo en las siguientes oportunidades: Inc. a). En la segunda quincena de marzo de cada año, para recibir la Memoria Anual del Presidente del Consejo Directivo y aprobar los Estados Financieros al 31 de Diciembre del último ejercicio, con el informe del Comité de Patrimonio y dictamen de la Junta Revisora de Cuentas”. Para cumplir la primera parte de dicho artículo, me encuentro frente a ustedes, nuevamente, para presentarles mi memoria anual de marzo del 2020 a marzo del 2021. AÑO DE LA ADMINISTRACIÓN DEL CLUB ÁNCASH EN PLENA PANDEMIA • Los principios de la moderna administración fueron establecidos por Henry Fayol, un minero francés que nació en Estambul, año 1841, y murió en París, año 1925, y dijo en el año 1916 que una moderna administración debe estar basada en 14 principios: 1. División del trabajo, 2. Autoridad y responsabilidad, 3. Disciplina, 4. Unidad de mando, 5. Unidad de dirección, 6. Subordinación del interés individual al general, 7. Remuneración, 8. Jerarquía, 9. Centralización, 10. Orden, 11. Unidad, 12. Estabilidad, 13. Iniciativa y 14. Espíritu de cuerpo. • Durante la pandemia, los principios de Fayol y de otros economistas o académicos quedaron casi en letra muerta o la mayor parte de ellos cayeron en saco roto, se convirtieron en estériles; por otros factores apremiantes. De los 14 principios mencionados líneas arriba, en el caso del Club Áncash, solo 5 nos auxiliaron y muy moderadamente: Autoridad y responsabilidad, unidad de dirección, subordinación del interés individual al general, unidad y espíritu de cuerpo; es decir, solo la tercera parte. • Si quisiéramos hacer una comparación, diríamos que ese hecho fue parecido a la labor de un médico y sus recursos tecnológicos frente a un caso de coma diabético. O parecido al de un capitán de barco en momentos acuciantes de una tormenta en alta mar. O al de un general casi sin recursos militares en el frente de batalla. Como en el caso de todos ellos, la administración se hizo más problemática en la nueva normalidad que en las épocas de normalidad, disminuyó en sus intenciones, casi colapsó en resultados. • Pero, al médico, que dentro de sus limitaciones, supo mantener a una persona con coma diabético y pudo salvarla: hay que darle las gracias. Al capitán que, a pesar del terrible embate del mar, venció a la tormenta y sacó su barco a flote: hay que agradecerle. Al general que, quemando el último cartucho de su fusil, supo conservar la serenidad y cuidó la supervivencia de sus soldados: hay que agradecerle. Todos ellos, en una situación desesperada recurrieron a su ingenio, a su creatividad para poder sobrevivir y sobreponerse, para mantener los recursos y los individuos a su cargo a salvo utilizando el principio esencial de Fayol; el “espíritu de cuerpo”; la solidaridad, la ayuda mutua. • Ello, en el año 2020 y en lo que va del 2021, ha ocurrido en todas las familias, las que, igual que las instituciones, han tenido que enfrentarse a la enfermedad y a las dificultades económicas. • Diría que para todos ha sido más difícil vivir durante la pandemia que antes de ella. ¿Qué individuo, qué núcleo familiar, qué comunidad, qué institución no ha mermado todas sus actividades, sus ingresos y su producción? Muchos han perdido a sus seres queridos para quienes van mis plegarias para que estén en la gloria de Dios. Hemos perdido a distinguidos asociados, para quienes en forma especial va nuestra oración para que estén gozando del reino de Dios. • Por eso, es conveniente que, en primer lugar deje constancia que doy un voto de aplauso y otro de gratitud a los integrantes del Consejo Directivo período 2019-2021 porque, a pesar de todas las dificultades, supieron mantener la propiedad del club a salvo, resguardándolo de todas las avalanchas en plena época de la pandemia. Supieron usar “la subordinación del interés individual al general” y el “espíritu de cuerpo”, con vigencia permanente de una ejemplar conducta, con responsabilidad, confianza y solidaridad, sello imprescriptible y legado histórico de quienes formaron el Club Áncash. LA ADRENALINA ESTUVO REBOZANTE EN 2019 • Los asociados del club que colaboraron con todo el cronograma de actividades deben recordar que el año 2019 fue de plena efervescencia cultural y se cumplieron con creces los planes trazados. La administración fue fluida y la adrenalina se mantuvo al tope tratando de resolver de la mejor manera posible la planificación, organización, dirección, coordinación y control en el quehacer cotidiano del club. • Pero, cuando todo estaba preparado para relanzar el club y encontrar las alas del éxito, en el mes de marzo de 2020 tuvimos que parar todo, bruscamente. • Creíamos y creo que también todo el mundo creía, que era cuestión de poco tiempo y, fatalmente, el tiempo también fue contagiado por el COVID19 y se enfermó hasta el día de hoy y no se sabe cuándo se va a sanar. DOS EJEMPLOS PARA QUE NOS DEMOS CUENTA DE LA NEFASTA INFLUENCIA DEL COVID 19 EN EL CLUB ÁNCASH 1). Ustedes saben que nuestro potaje de bandera es el picante de cuy. La administradora, seguramente para atender un probable consumo mensual, adquirió 700 cuyes y llenó la refrigeradora. Con la paralización hubo ausencia total de los comensales y el insumo estaba allí cuando se declaró la pandemia y la cuarentena. Mientras la descomposición estuvo todavía ausente, se ordenó la venta. Pocas decenas de cuyes se vendieron al remate y la gran mayoría se perdió, aumentando la deuda con la vendedora, que a la sazón ya bordeaba los 9 mil soles. Cosa parecida ocurrió con otros productos de pan llevar, muchos de los cuales siguen inmovilizados. 2). El 23 de noviembre de 2019 desapareció como por arte de magia más de 6 mil soles de la caja fuerte. Se hizo la denuncia policial. Los trámites en la comisaría de Jesús María quedaron paralizados por la pandemia. Después de un año y cuatro meses, recién el día 19 de marzo del 2021 me llamaron para hacer mi declaración. El día 22 me han dicho que, como soy adulto mayor, van a preguntar a fiscalía si se puede hacer la comparecencia vía Zoom. Esos dos ejemplos, uno, de apertura de la pandemia y, dos, al estado en que está ahora grafican las consecuencias que nuestro club tuvo y está teniendo en esta contingencia. Entre el caso 1 y el caso 2 múltiples problemas se presentaron y se tuvieron que resolver o tratar de solucionarlos. SUSPENSIÓN PERFECTA DE LABORES • En vista de la grave situación se tuvo que recurrir a la suspensión perfecta de labores, dispuesta por el gobierno hasta en tres oportunidades y la última de nuestro mandato se cumple el 5 de abril del 2021. • Para cuidar el local, se negoció con el guardián señor Raúl Vega para que se quede, pero también él ha optado por renunciar e irse hace poco, de tal manera que el club está solo con un vigilante de afuera. Como no hay recursos económicos para pagar a otro guardián permanente, se ha optado por cambiar las chapas y los candados. • Un bono de 1785 soles que dio el gobierno para aliviar el presupuesto de los trabajadores no se ha podido cobrar de Interbank, por limitaciones del estatuto para ese tipo de transacciones. De tal manera que nuestros trabajadores se han quedado sin ese beneficio, a pesar de las múltiples gestiones que se han hecho. • Con los ingresos por las elecciones, se ha cumplido con pagarles una deuda que se les tenía por días trabajados en el mes de marzo del 2020. ENFERMEDAD DEL PRESIDENTE • Una de las primeras víctimas del COVID 19 fue el que lee esta memoria, en la segunda quincena de marzo y contagiado en una actuación del día 12 de marzo en el Club Áncash. De tal manera que pedí licencia por 6 meses y la dirección del club estuvo a cargo de la asociada Blanca Beatriz Silva Ramírez, a quien agradezco públicamente por su entrega al club en momentos tan difíciles, porque lo hizo con abnegación, cariño y mucha capacidad. Los demás miembros del Consejo Directivo también estuvieron a la altura de ese inusual reto, actuaron con prolijidad, entusiasmo a toda prueba y competencia. Va mi agradecimiento más profundo a Ricardo Losza, Justo Ponte, Mariluz Antúnez, Américo Valverde, Rosa Chincha, Zonia Ríos, Ulises Vidal, Leopoldo Ochoa, Julio Gonzales, Gloria Alvarado y Betsabé Salinas. • Todos ellos no se amilanaron ante la pandemia y con mucha responsabilidad, ingenio e inteligencia asumieron el reto de mantener el club a pesar de la difícil contingencia. No abandonaron el barco, se mantuvieron firmes. Felizmente, pronto me restablecí y pude incorporarme plenamente al Consejo Directivo. Me acuerdo de las sesiones virtuales del Consejo Directivo casi todos los martes de todas las semanas para resolver los problemas, pergeñar propuestas y endulzar la menta con el optimismo y la esperanza. • Sin mediar el peligro para nuestra salud, se formaron varias comisiones y se hicieron encargos individuales para que hagan gestiones presenciales en diversas instituciones públicas y privadas. • Se efectuaron programas culturales vía Internet de celebración y homenaje a las principales fechas cívicas del club y del departamento, así como la presentación de nuestros cultores del arte y del folclore. LOS GASTOS FIJOS • Otro problema que muy pronto se detectó fue el de los gastos por servicios permanentes, tales como la luz, agua y teléfono. • El teléfono nunca pudo estar a nombre del Club Áncash por limitaciones estatutarias. Estuvo a nombre de los presidentes y esta vez no podía ser la excepción. Como se tenía la esperanza de que pronto podríamos reabrir el club se hizo un esfuerzo económico y se habilitó el servicio, pero nos dimos cuenta que era un gasto inútil y tuvimos que suspenderlo. A pesar de ello, en los meses de diciembre, enero y febrero Movistar lo adicionó a la cuenta de mi celular, con el cargo de “teléfono de hogar”, y se pagó la suma de 426 soles para darle de baja definitivamente. • La luz eléctrica pagaba la suma de 1800 soles, lo que también era una carga adicional. Se negoció con Luz del Sur para hacerlo por partes y al no tener la certeza de una pronta apertura del local se tuvo que pedir la suspensión del servicio. • Los arbitrios municipales tampoco podían faltar y eran de una cifra similar al del recibo de luz (1834,00 soles mensuales) . Se ha hecho la gestión correspondiente y se ha logrado una rebaja considerable (1122,00 soles mensuales). • Otras cargas eran las deudas del club a la Municipalidad de Jesús María, habían llegado a 137 mil soles. El Fiscal señor Justo Ponte encontró una conexión política y se sinceró la deuda, consiguiéndose una rebaja hasta los 10 mil, aproximadamente. • Con respecto a las ocho cargas y gravámenes de embargo a la propiedad del Club Áncash que se encuentran en SUNARP se obtuvo la información que 5 eran de los años 1999 al 2006. Se ha hecho el trámite documentario correspondiente para levantar dichas cargas por caducidad, por tener más de 10 años de antigüedad. Dos embargos de INDECOPI fueron cancelados por el Club Áncash, pero no fueron levantadas las cargas en SUNARP, por lo que se ha remitido una carta a esta entidad, pidiendo los documentos para que el club haga el trámite de levantamiento de las cargas, una de 2854,00 soles y otra de 5591,00 soles. SIN RESPALDO FINANCIERO • Todas estas medidas, unas más exitosas que otras, se realizaron sin ningún recurso económico, con ingreso cero, solo por el entusiasmo y la dedicación de los integrantes del Consejo Directivo. LA LICENCIA DE FUNCIONAMIENTO . Cuidándonos del COVID 19, en una de las reuniones en el patio del local municipal con funcionarios de la Municipalidad de Jesús María se recabó la información verbal de que el Club Áncash nunca había perdido su licencia de funcionamiento. Ni cortos ni perezosos, hicimos una carta y tuvimos la grata satisfacción de tener la respuesta: la licencia de funcionamiento del Club Áncash “ESTÁ VIGENTE”. • Este es el documento aludido: • En la última parte dice, textualmente: “Finalmente, en base a lo indicado en los párrafos anteriores, señala que el predio ubicado en Av. Horacio Urteaga N° 660 – Jesús María – cuenta con la misma zonificación calificada: RDA (Residencial de Densidad Alto) por la cual se emitió el Certificado de Licencia de Funcionamiento N° 003445 de fecha 16.12.2010¸ en consecuencia, no existiendo Cambio de Zonificación a la fecha, no ha sido oponible y por lo tanto a la fecha de hoy, el Certificado de Licencia de Funcionamiento N° 003445 es válida y se encuentra vigente. “Sin otro particular, se da por atendida su consulta la misma que será derivada a la Subgerencia de Atención al Ciudadano, Gestión Documental y Archivo para su custodia y archivo”. (Sello y firma de la MJM). • He copiado esta constancia histórica para que cada asociado lo tenga y sepa que en cuanto al funcionamiento del Club Áncash no hay ninguna restricción para su uso y funcionamiento y que este documento sirva de testimonio del interés y del éxito que hemos tenido para resolver tan grave problema, que venía arrastrándose desde el año 2010. MANDATOS DEL ESTATUTO • El estatuto es un instrumento jurídico importante para toda institución social. Fatalmente, el nuestro ya está obsoleto, con muchos puntos contradictorios y limitativos. No es un cuerpo jurídico moderno ni dinámico. Al contrario, pasadista y estático. Nos hicimos el propósito de revisarlo y dar alternativas. Dejamos escritos 3 proyectos, de Leopoldo Ochoa, Justo Ponte Cruz y Julio Villanueva Sotomayor para que se tenga en cuenta en la reformulación del estatuto, si es que se considera por conveniente. • Sin embargo, el Consejo Directivo cumplió con todos sus preceptos y llamó a varias asambleas para hacer las consultas correspondientes. • Una de las más importantes fue la que se realizó el 23 de enero de 2021 para dar cuenta de los planes de reactivación, a corto, mediano y largo plazo. El Plan “C” pidió el aporte de los asociados, cosa que se produjo en cuenta gotas. El Plan “B” establecía una ayuda ofrecida por el Ministerio de Cultura, asunto que no se obtuvo por la repartija habitual en el Perú. El Plan “A” se refería a una renovación integral del club y debía llevarse a cabo a largo plazo, con intervención de todos los asociados y de varias comisiones de apoyo, asesoramiento y consulta. También fue abortado por falta de comprensión, comunicación y muy serios prejuicios, entendible en una sociedad como la nuestra. LAS ELECCIONES DEL 2021 • Con el más amplio espíritu democrático, que lo defendimos a raja tabla en el pasado y lo seguiremos defendiendo en el futuro, se dio facilidades para la participación de los asociados en dicho evento. • Por acuerdo del Consejo Directivo y ante la imposibilidad de que el Club Áncash tenga su cuenta propia y que el Subdirector de Economía tenía una cuenta mancomunada, se abrió una cuenta especial a nombre del presidente del club al iniciarse dicho proceso, con cuenta única para ese fin y con tarjeta única para dicho fin, de tal manera que el 18 de febrero, día en que se cerraban las inscripciones de asociados para ser hábiles para el sufragio, la mencionada cuenta también se cerró con un saldo favorable de 17 570 soles, dinero que pasó ese mismo día para que lo administre el señor Subdirector de Economía. • De no ser por esa medida, los asociados, muchos de ellos adultos mayores, habrían tenido dificultades para hacer sus aportes y participar en la más importante actividad democrática del Club Áncash. PALABRAS FINALES • Hemos cuidado la única propiedad del Club Áncash en el año de la pandemia, con esmero, sacrificio y dedicación. • Hubiéramos querido entregar un club remozado, con más prestigio cultural y con ambientes que debían bullir con el recuerdo de todos ustedes, de sus amigos y parientes, así como en el año 2019. • El Club Áncash es parte de la memoria histórica del departamento, de los asociados y de la cultura regional, por lo que está por encima de todas las circunstancias habidas y por haber, de todas las dificultades sociales e individuales, porque allí está el alma colectiva y porque allí debe prevalecer el espíritu de cuerpo, la solvencia moral de quienes lo dirigen y la vigilancia objetiva de quienes son los dueños, los respetables y dignos asociados. Lima, 26 de marzo de 2021.