® Samuel Cavero Galimidi (escritor peruano)
Cuando la conocí personalmente a la distinguida poeta Bella Clara Venturaquedé gratamente sorprendido, ese rostro me era ya muy familiar, parecía que ya había visto antes muchísimas veces. Probablemente el Internet hizo su efecto. «Si no tenemos paz dentro de nosotros, de nada sirve buscarla fuera», nos dice:Francois de la Rochefoucauld (1613-1680), Escritor francés. Bella Clara Ventura es una dama en paz, con mucha paz, su mensaje espiritual siempre es de paz y nos brinda un baño espiritual de paz leyéndola y escuchando como ella recita sus poemas. Por eso digo yo algo de cierto debe haber en ese don ubicuo de reconocerse entre poetas por afinidades y lazos espirituales. Fue para la presentación de su libro Paz, Sicaria de la lágrima editado por la prestigiosa Editorial Oveja Negra en coedición conAlejo Ediciones, que lo dirige el destacado escritor y editor peruano Santiago Risso. Recordemos que Oveja Negra manejó por más de 25 años las ediciones deGabriel García Márquez. Esto fue el 3 de marzo del año 2011, en el auditorio delInstituto Cultural Peruano Norteamericano en Miraflores, Lima.
Paz, Sicaria de la lágrima, desde la carátula hasta la última página es un libro que impresiona no solo por el cuidado del diseño, la calidad de la impresión, las dedicatorias y mensajes de otros prestigiosos poetas, los mismos que resaltan las bondades de quien lo escribió y sobretodo la excelsa calidad de los poemas de la autora. Por ejemplo allí está la palabra de poetas de gran prestigio, andadura por el mundo de las letras y trayectoria intelectual, como: José Héctor Corredor Cuervo, Ernesto Kahan, María Cristina Azcona, Hugo Leguizamón, Carlos Garrido Chalén, Susana Roberts y Ady Yagur, poeta argentino-israelí.
Paz, Sicaria de la lágrima, quizá nos propone una «reingeniería del corazón» (Cielos en llamas). Es un firme y vigoroso canto a la paz. ¿Por qué no? Jean Paul Sartre, (1905-1980), Filósofo y escritor francés, decía: «La violencia jamás resuelve los conflictos, ni siquiera disminuye sus consecuencias dramáticas». Por su parte Mahatma Gandhi (1869-1948), Político y pensador indio, ha dicho: «El hombre nació en la barbarie, cuando matar a su semejante era una condición normal de la existencia. Se le otorgo una conciencia. Y ahora ha llegado el día en que la violencia hacia otro ser humano debe volverse tan aborrecible como comer la carne de otro». Cuando le preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica Mathama Gandhi sugirió la mejor de todas: La paz.
La paz nunca ha sido un camino fácil entre las naciones “civilizadas”. En un mundo convulsionado y afincada sus raíces colombiana-mejicana e incluso judía de la autora, se puede decir que en Bella Clara Ventura el derecho a reclamar por la paz es grito, llaga, sufrimiento perpetuo. Albert Einstein (1879-1955), Científico alemán nacionalizado estadounidense ya lo dijo: «La paz exige cuatro condiciones esenciales: Verdad, justicia, amor y libertad».
¿Quién es Bella Clara Ventura? Se trata de una voz iluminada, una mujer muy apasionada, trotamundos, infatigable luchadora por la paz (y por un mundo mejor) a través de sus poemas. Muchas veces me he preguntado para qué sirven los poemas y nuestros escritos. Si sirven para inspirar paz y amor, enhorabuena. Por eso José Héctor Corredor Cuervo no duda en calificarla dedicándole un poema: A una mujer magiconsciente, noble, errante golondrina, con fe arrolladora, de corazón de oro y alma cristalina.
Vayamos a sus poemas. El poema Paz, por ejemplo, personifica a la paz en mujer. «La paz, con porte de mujer», nos dice. Paz, «la figura de paloma, mensajera de atareados vientos». El poema Paz y otros claman «la no violencia».
El llamado a la paz se hace poesía en Bella Clara Ventura de una manera preciosista en sus poemas, por ejemplo en Paso a paso:
La paz, celestina de nuestros espíritus
al concierto del diálogo del paso
imprime ecos de cadencia.
Coreografía de la paz.
Qué duda cabe cuando el motor que la motiva a escribir a Bella Clara Venturaes la paz, la paz que se debe promover, la guerra que se debe aplacar, los odios y guerras del mundo que se deben desterrar. La poeta se convierte así en una abanderada de la paz, una luchadora por la paz, una embajadora de la resistencia a la violencia desde el hogar mismo que nos da su formación, sus aromas, sus comidas y recuerdos. En el poema Canto a la Paz, nos dice:
¡Viva la paz!
Germina en el abrazo.
sabor de canela
con sazón a hierbabuena
y una pizca de miel…
Nuestra excelsa poeta viajera no cree en las quimeras y menos en los fanatismos, traspasando fronteras territoriales y las fronteras mentales ha conocido la otra cara despreciable del ser humano, así de los horrores de la larga guerra interna colombiana, reclamando en sus versos «que la selva no sirva para dejar en cautiverio / a ningún compatriota / cuyo destino sea el encierro / tras los muros de los árboles / convertidos en candados» y que conoce los dramáticos momentos de violencia que vive México, así muchos países árabes de África y en especial el Medio Oriente: el dolor por la muerte, por la sangre, por quien lo provoca un acto criminal se hace verbo, clamor y hasta desprecio:
Hijos de madre o de mujer de la noche.
Crece el sentimiento de solidaridad.
Hijo de Puta o “hijodemadre”
es el que aprende a disparar.
No es para menos. Triste realidad y contradicción lo que sucede en Colombia desde hace muchos años y a todos nos duele y conmueve. Así pues en el poema Humos de Paz, la poeta se interroga: «Si fuese yo el próximo secuestrado / ¿cómo me sentiría frente a los muros de la selva? / Nace como pulmón del mundo / y se les convierte en prisión / de infamias sugeridas».
Otros poemas dignos de elogio en Paz, Sicaria de la lágrima son Zoológico, lleno de luminosidad y la fauna variopinta en Recetario, que expresa esa mixtura de ser abnegada mujer-poeta-ama de casa-cocinera creativa, el recetario dictado por el Cielo en divina obra de creación bíblica:
Bajo el canto de las musas,
a la carta hoy comerás
manjares con fórmula divina.
Seguí leyendo,
aclarando una vista a ciegas.
Un rebaño de harina de amor,
Una taza de ternuras,
Una pizca de dulce,
3 huevos de paz…
Y es que la poeta Bella Clara Ventura sabe ante todo que «a la guerra no se juega», aunque se tenga huevos, ni se debe jugar en estos tiempos sumamente convulsionados por culpa de la mano del Hombre. Su poesía canta y encanta. Y por eso no se cansará de cantar a la paz de mil modos. Y se interroga: « ¿Quién sanará a Colombia? » Señalada sicaria de la lágrima, que da título al libro con el poema:Mi país… Por ejemplo los poemas: El Cantar de la Paz, La Armonía, Mi país pupilas en quebranto, Paz, Monte de Paz e incluso Palestino, pero también Lugar Común, Tsunami de Paz y el muy ecológico poema Ecos de Agua nos invitan a respirar ese aire litúrgico bienhechor : «Paz me llamo desde que nací / del tropiezo del trueno con el relámpago…». Y pese a ser poemas, sólo poemas, rosas sobre el cañón, lo cual desde ya es limitante, parecen reclamar como un delfín del Amazonas una atenta lectura de sus versos que son en esencia poesía sabiamente meditada, poesía que apuesta por la vida, por la belleza de la naturaleza, por la diversidad de las especies naturales, por el Hombre en paz y por un mundo mejor, sobretodo con el ecologismo en contraparte al calentamiento global:
Y uno se pregunta
desde el infinito pensamiento
¿Cómo pudo ocurrir tal tragedia?
Si al hombre capacidad le dieron
Para cuidar tierra y ser…
Bella Cara Ventura, estoy seguro, seguramente piensa desde el fondo de su corazón como Isaac Asimov (1920-1992), Escritor y bioquímico estadounidense.¡Y como yo! Asimov decía: «Quisiera sufrir todas las humillaciones, todas las torturas, el ostracismo absoluto y hasta la muerte, para impedir la violencia».
Biografía de Samuel Cavero Galimidi:
Poeta y escritor peruano (Puquio, Ayacucho, 22 Julio de 1962). Estudió la carrera de literatura y Lingüística en la Pontificia Universidad Católica del Perú (1983-1987). Es periodista profesional colegiado. Fue aviador militar de carrera en su país (1979-1989). Estudió la carrera de Sociología en la Universidad San Martín de Porres de Lima (1986-2001) Hizo su postgrado de Sociología, Maestría, en la Universidad de Artes y Ciencias Sociales de Chile (ARCIS) y Paris Val de Marne (2002-2005). Como escritor ha participado en muchos encuentros como el I Encuentro hispanoamericano de Jóvenes Creadores en Madrid, España (1985), así como en diversos congresos literarios, de historia, sociología y política en Latinoamérica. También destaca su participación como poeta en el XXI Congreso Mundial de Poetas celebrado en Sydney (2,001) Sus poemas han recibido diversos premios literarios en España, Perú, EE.UU. y Australia. Ha obtenido Premio nacional de Novela de la Asociación Nacional de Escritores del Perú. 1986; el Premio Internacional de Ensayo Gabriel Mistral (Gobierno de Chile, 1989); sus dos cuentos obtuvieron el primer y segundo lugar respectivamente en el Concurso Literario Asociación Colombia, 2003. Su poema titulado Canto Coral a Pablo Neruda obtuvo el 3er puesto en el Certamen Internacional de Poesía Centenario de Pablo Neruda (Australia, 2005). Ha obtenido numerosas menciones honrosas, entre las que destacan la del Spanish Club en Sydney y el concurso de cuentos “Fernán Caballero”, convocado por el Consulado General de España en Melbourne, con la colaboración y patrocinio de la revista de hispanismo y estudios Gallegos Antípodas. También en el Concurso Mundial de Poesía Municipalidad de Tumbes, 2008. Es el Fundador y editor del sello EditorialTerra Australis con sede en Australia. Pertenece al Grupo Literario ‘Palabras’, actualmente el es Presidente de la Asociación de Escritores y Artistas del Orbe, miembro del Consejo Directivo del Gremio de Escritores del Perú y es el propulsor de un nuevo movimiento poético de vanguardia en este Continente.