Cuando leemos los ''Ensayos'' de Montaigne debemos darnos cuenta que lo que leemos es una sui generis autobiografía del autor. Su vida, en esta obra, transcurre no a lo largo de la línea de tiempo sino, que al leer su autobiografìa descubrimos su autoretrato en un marco de atemporalidad.
El ensayo como 'genre' fue iniciado por este influyente pensador francès del siglo XVI. Michel de Montaigne, hijo de madre española y padre galo. Èl no se consideraba un filòsofo, pero si lo fuera, el mismo lo manifestarìa: 'habrìa sido por accidente'. Su stand sin pretensiones, su modestia, se puede resumir en la inscripciòn hecha en su famosa medalla: 'Que sais je?', (¿Qué se yo?).
En sus ensayos, que significan pruebas, intentos provisionales, Montaigne propone que escapemos de nuestras ansiedades y vanidades. Que aprendamos a vivir por nosotros mismos en el momento. Montaigne, un conservador con c minùscula, cuestionò la moralidad convencional cristiana y propuso la bùsqueda del placer y la felicidad. Su pensamiento no fue una establecida filosofìa sino un proceso de pensamiento en marcha con sus escèpticas conclusiones, Montaigne quiere cuestionar las convenciones pero al mismo tiempo trata de entender sus valores. La justicia, en su opiniòn, està allì para disuadir los peores impulsos y no para animar a los mejores. Censurò la anarquìa y el desgobierno. Sus ensayos cubrieron temas tan variados como: pulgares, olores, caníbales, soledad, crueldad, etc, estos fueron temas que tocaban lo esencial y cotidiano de la vida. William Shakespeare se refiere al ensayo de Montaigne sobre canibalismo para escribir su obra, aclamada mundialmente, ''The Tempest''. Para Michel Montaigne no era mayor el salvajismo mostrado por los canibales que el salvajismo mostrado por los hombres civilizados del occidente. Los primeros, plantea Montaigne, descuartizan un cadàver para alimentarse mientras que los segundos descuartizan al hombre con vida para quitarle la vida. Recordemos el intento de descuartizamiento de Tupac Amaru en el Perù. Este tipo de 'ajusticiamiento' fue comùn tambièn en Europa.
Montaigne ejerciò influencia en filòsofos como Descartes y Blaise Pascal, entre otros pensadores de la ùltima parte del renacimiento. Montaigne solìa decir que èl no enseñaba sino que 'decìa'. Esos decires los expresaba tambièn en el registro de cartas, un gènero que ocupò el cuerpo de la escritura de Montaigne. Varios de sus ensayos fueron en forma de misivas dirigidas a mujeres pertenecientes a la nobleza. Montaigne se sincroniza con los moribundos, no con los muertos. Montaigne, nos dice que cuando la muerte llegue debe de encontrarnos con las botas puestas y que debemos estar preparados para partir en cualquier momento. Èl se preparaba para su propia muerte que deseaba sea tranquila y silenciosa. En 1598, en Parìs, sufriò una enfermedad dolorosa: càlculos renales. Sus pensamientos, como lo manifestè al inicio, siempre fueron provisionales, el ensayo es una prueba, tiene estado provisional. Todo es dudoso. Èl fue un gran escèptico que cuestionò los reclamos humanos sobre el conocimiento. Dudaba que los humanos fueran màs inteligentes que los animales o que los canìbales fueran màs salvajes que los 'civilizados'. Montaigne analizò el canibalismo dentro de un contexto cultural, Se podrìa decir que en sus consultas se adelantò con el uso las disciplinas de la antropologìa y etnologìa. Montaigne llevò sus ''Ensayos'' a Roma donde la iglesia le sugiriò que se rectificara en su ensayo sobre la fortuna por considerarlo un tema pagano. Montaigne no hizo caso a ese pedido y su obra siguiò difundièndose hasta que 100 años màs tarde sus ''Ensayos'' fueron puestos en la lista de obras prohìbidas por la Iglesia Catòlica. Erà la època cuando autores de mayor sentimiento ateìsta irrumpìan en la arena intelectual y veìan con interès el suave cuestionamiento de Montaigne hacia la iglesia y y la bùsqueda del placer y la felicidad.
Montaigne, que tamibèn fue influencia en Jean-Jacques Rousseau, naciò el 28 Febrero de 1533, en Château de Montaigne y falleciò el 13 de setiembre de 1592, en Château de Montaigne, Francia.