Este año el encuentro llevará el nombre del reconocido poeta y promotor cultural chileno, Alfred Asís. La bella Tarija se viste de gala para recibir a escritores de todo el mundo.
"El Moto Méndez"
Eustaquio Méndez Arenas, nació el 19 de septiembre de 1784 en Churqui Huayco, Canasmoro, villa de San Lorenzo, Departamento de Tarija, que en una época perteneció a la provincia argentina de Salta, pero hoy es parte del sur de Bolivia, hijo legítimo de Juan Méndez y de María Arenas, ambos criollos hijos de españoles, residentes en Canasmoro. Era un pequeño hacendado de la zona, buen jinete, a pesar de que había perdido su mano derecha en un accidente, lo que le ganó el apodo de "El Moto" Méndez (muy probablemente del vocablo quechua: Mut'u). Se enroló en la división de gauchos de Güemes, con los que participó en la primera expedición auxiliadora al Alto Perú, luchando en la victoria de Suipacha. Más tarde luchó contra las invasiones realistas en la Guerra Gaucha. A fines de 1812 formó su propia guerrilla en la región de Tarija, y peleó activamente contra las varias invasiones de los españoles. Cada vez que Tarija caía en manos de los realistas, Méndez lanzaba sus ataques sobre la ciudad o sobre los caminos que la comunicaban con el resto del Alto Perú, por el norte o por el oeste. Logró sus mayores proezas en el año 1816, después de la batalla de Sipe-Sipe: aunque el ejército enemigo capturó y logró retener en su poder a Tarija, durante más de un año los rodeó y atacó metódicamente, cortando sus líneas de comunicaciones y, sobre todo, impidiendo que realizaran operaciones desde esa ciudad. Sólo cuando los caudillos de las provincias de Chuquisaca y Cochabamba fueron vencidos, Méndez fue obligado a ceder. Se retiró hacia el norte de Salta, desde donde realizó varias campañas hacia Tarija, contando con el apoyo de los gauchos de Güemes. Por otro lado, perteneció al partido federal de Salta, y apoyó la gestión política y militar de Güemes. En 1824 cayó prisionero del general Pedro Antonio Olañeta, que poco antes se había declarado independiente del virrey De la Serna. Olañeta le perdonó la vida, pero a cambio lo condenó a servir como soldado en sus filas. A los pocos días desertó, y poco después apoyó la invasión al Alto Perú del general Jerónimo Valdés, partidario del virrey, y mantuvo ocupadas por varios meses a las fuerzas de Olañeta. Al parecer, su intención era debilitar a los realistas con conflictos intestinos. Tras la retirada de Valdés, huyó a Salta. Regresó a Tarija en la división del general Arenales en 1825. Más tarde fue reconocido como coronel del ejército boliviano, y participó en las guerras civiles de ese país a favor del general José Ballivián. Murió en una de las tantas batallas de guerra civil boliviana: la batalla de Santa Bárbara de Tarija, en la que fue derrotado por el coronel boliviano Rosendi.
"El Moto Méndez"
YA VIENE EL ENCUENTRO DE TARIJA, BOLIVIA.
Hace algún tiempo visitamos San Lorenzo, lugar tarijeño donde nació Eustaquio Méndez Arenas, más conocido como "El Moto Méndez". Méndez fue uno de los caudillos de las Provincias Unidas del Río de la Plata y jefe militar en la guerra de independencia de Bolivia. La visita se realizó dentro de la programación del IX Encuentro Internacional de Escritores y Artistas organizado por la Unión de Escritores de Artistas de Tarija presidida por el Ing. René Aguilera Fierro. El encuentro se volverá a repetir en su versión 2019, del 14 al 19 de ocubre.
De Wikipedia:
Eustaquio Méndez Arenas, nació el 19 de septiembre de 1784 en Churqui Huayco, Canasmoro, villa de San Lorenzo, Departamento de Tarija, que en una época perteneció a la provincia argentina de Salta, pero hoy es parte del sur de Bolivia, hijo legítimo de Juan Méndez y de María Arenas, ambos criollos hijos de españoles, residentes en Canasmoro. Era un pequeño hacendado de la zona, buen jinete, a pesar de que había perdido su mano derecha en un accidente, lo que le ganó el apodo de "El Moto" Méndez (muy probablemente del vocablo quechua: Mut'u). Se enroló en la división de gauchos de Güemes, con los que participó en la primera expedición auxiliadora al Alto Perú, luchando en la victoria de Suipacha. Más tarde luchó contra las invasiones realistas en la Guerra Gaucha. A fines de 1812 formó su propia guerrilla en la región de Tarija, y peleó activamente contra las varias invasiones de los españoles. Cada vez que Tarija caía en manos de los realistas, Méndez lanzaba sus ataques sobre la ciudad o sobre los caminos que la comunicaban con el resto del Alto Perú, por el norte o por el oeste. Logró sus mayores proezas en el año 1816, después de la batalla de Sipe-Sipe: aunque el ejército enemigo capturó y logró retener en su poder a Tarija, durante más de un año los rodeó y atacó metódicamente, cortando sus líneas de comunicaciones y, sobre todo, impidiendo que realizaran operaciones desde esa ciudad. Sólo cuando los caudillos de las provincias de Chuquisaca y Cochabamba fueron vencidos, Méndez fue obligado a ceder. Se retiró hacia el norte de Salta, desde donde realizó varias campañas hacia Tarija, contando con el apoyo de los gauchos de Güemes. Por otro lado, perteneció al partido federal de Salta, y apoyó la gestión política y militar de Güemes. En 1824 cayó prisionero del general Pedro Antonio Olañeta, que poco antes se había declarado independiente del virrey De la Serna. Olañeta le perdonó la vida, pero a cambio lo condenó a servir como soldado en sus filas. A los pocos días desertó, y poco después apoyó la invasión al Alto Perú del general Jerónimo Valdés, partidario del virrey, y mantuvo ocupadas por varios meses a las fuerzas de Olañeta. Al parecer, su intención era debilitar a los realistas con conflictos intestinos. Tras la retirada de Valdés, huyó a Salta. Regresó a Tarija en la división del general Arenales en 1825. Más tarde fue reconocido como coronel del ejército boliviano, y participó en las guerras civiles de ese país a favor del general José Ballivián. Murió en una de las tantas batallas de guerra civil boliviana: la batalla de Santa Bárbara de Tarija, en la que fue derrotado por el coronel boliviano Rosendi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario