'Julio Rodríguez es un nombre común y corriente, que probablemente pase desapercibido para muchos. Pero cuando decimos Yancen, en el recuerdo y en el corazón de la gloriosa JCP de los 80, entonces a cientos de hombres y mujeres nos transporta la memoria del buen amigo y camarada, el hombre bonachón, juguetón y solidario, el militante comunista combativo y siempre dispuesto a asumir las tareas más complejas que el Partido le encomendaba'. Así se refiere Emilio Mendoza a ese gran hombre que tuve el honor de conocer en Madrid, hace un par de años. Yancen nos atendió, nos hizo sentir en casa, y fue su esposa quien nos agasajó con el más exquisito cau cau que haya comido en mi vida, y por supuesto, servido por Yancen.
Emilio dice que 'Yancen es un hombre que a pulso se ganó el respeto de todos, y en los momentos más difíciles de la historia del PCP, nunca dudó en salir en defensa de los ideales del partido de José Carlos Mariátegui, motivo por el cual fue injustamente encarcelado durante la dictadura fujimontesinista'. Recuerdo que, en Madrid, Yancen me contaba que había sido Teniente Alcalde de Surquillo y que en sus manos había recaído la organización de la seguridad ciudadana del distrito. También lo recuerdo bailando y comiendo en un restaurante peruano, esta vez pollo a la brasa, en las afueras de Madrid. Lo recuerdo con una sonrisa contagiante y una caballerosidad indiscutible. Nos contó historias inolvidables acerca de su 'stand' en la lucha por el socialismo en nuestra patria.
Hoy, Yancen, lucha contra el cáncer en aquella ciudad que me brindó la oportunidad de conocerlo. Se encuentra en estado de coma en un hospital madrileño, luchando por la vida que tanto defendió. Yancen, hermano, tienes que resistir. No podemos creer que te esté acorralando la muerte. Yancen, hermano, camarada, nos sentimos acongojados, fuerza Yancen, fuerza.....